Una tarde en Japón

Guia de personajes: DAVID

Nombre: David (apellido desconocido)
Edad: 38 años
Origen: Virginia - Estados Unidos
Ocupación: Profesor de ingles
Apariencia:
Hombre blanco de 1.78 de estatura, cabello rubio casi blanco y un bigote al estilo de los años 70. Contextura delgada
Historia:
Jake Miller, amigo de Jake de la infancia, a causa de un divorcio y un juicio polémico perdió su casa y todo el dinero que tenia. Jake, en crisis, le pidió a David que lo lleve a su casa para hablar con su ex esposa y él acepto. Lo que no sabía es que su intención era de asesinarla.
David fue acusado como complice de homicidio aunque nunca supo de lo que había ocurrido en la casa.
Debido a eso David tuvo que dejar a su esposa y dos hijas de 4 y 7 años para huir a un país de Latinoamérica y vivir ahí sin que lo encuentre la policía.
David llego al Perú y encontró trabajo como profesor de inglés en una institución privada, le pagan lo suficiente como para que alquile una habitación cerca de su lugar de trabajo.
David odia trabajar como profesor de inglés, siempre odio estar en clase en la universidad y regresar a estar metido en aulas otra vez le es muy desmotivador.
David ya lleva viviendo en Perú 4 años y aun no domina el castellano con fluidez por lo que se le hace casi imposible encontrar un trabajo que le de mayores ingresos, entonces David decidió salir a vender canchita en lugares cercanos a su departamento para ganar unos soles de mas que le sirven para pagar la comida y el alcohol que lo ayuda a sobrevivir el día a día.

Regresa el avestruz!

Era un frío jueves por la tarde, estaba caminando por las calles de lima mientras escuchaba un poco de música y pensaba acerca de mis problemas existenciales. Mientras escuchaba “Nostalgias” de Andrés Calamaro un perro de la calle se me acerca con una mirada desafiante, su pelo al parecer era dorado pero las noches durmiendo en la calle lo convirtieron en un pelaje grisáceo y desvaído, su mirada desafiante me dio a entender que estaba atravesando “su territorio” y que debía retroceder, pensé por un momento si debía seguir mi camino y encarar al perro o dar marcha atrás y continuar por otro lugar.

Lo miré por unos segundos y le dije: Hola

Después de mi saludo, su mirada desafiante se transformó en una mirada amistosa, y le siguió un movimiento de cola que puso la piel de gallina, probablemente ese perro no entendió que el sonido que pronuncié era un saludo pero sabía que yo no era un enemigo sino que era un amigo y pude seguir tranquilamente mi camino.

Seguí mi camino, igual con música pero esta vez no pensaba sobre mis problemas existenciales sino que pensaba en los suyos, ese perro dormía en las calles siempre y buscaba su alimento por donde podía, y como él había miles de perros y gatos más sin hogar ni un amigo que los cuide. El movimiento de cola de ese perro me convirtió en su amigo, y como su amigo fui a comprarle algo que le quite el hambre (momentáneamente).

Amigo, te recordaré cada vez que camine por las calles de Lima nuevamente, te recordaré cada vez que ponga esa canción de Calamaro que escuchaba cuando te vi. Probablemente no te vuelva a ver pero me inspiraste a poner mi granito de arena para cambiar la vida de animales como tú.

"Cuando todos los animales se hayan ido, el hombre morirá de soledad"

El sueño de un gato

La pesadilla del coco

Cuatro y media de la madrugada, me despierto de golpe, mi respiración está acelerada, estoy bañado de sudor, miro a mi alrededor y veo que estoy hechando en mi cama. Fué solo una pesadilla, puedo dormir tranquilo otra vez, me levanto para ir al baño, me miro al espejo.

Un momento... ¿Donde estan mis colmillos? ¿mis garras? Solo veo una cara rendonda llena de pelos.

Ese no soy yo!

No soy el coco, soy un coco!

Desperté otra vez

Que extraña sensación, cuando una aguja entra por tu piel.
Tengo que confesar que esa sensación me gusta, me gusta mucho. No se si es el dolor, si es el morbo o si es la sangre que sale de mi cuerpo la que causaba tanta satisfacción.

Mil agujas entraban por mi cuerpo,
yo sangraba y reia...